Después de todo el trabajo físico vino la parte más bonita, necesitábamos una imagen, una marca y para ello buscamos una diseñadora, Mati de CasaChiribiri, le contamos nuestra idea y captó lo que queríamos transmitir, ella nos diseño marca, logo, etiquetas, página web…
Todo iba tomando forma poco a poco.
Reformamos un pequeño bajo familiar y lo adaptamos para envasar y almacenar nuestra miel, así que con los envases en el almacén, la imagen de marca lista, las etiquetas impresas y la web preparada, lo único que necesitábamos era que nuestras abejas trabajaran bien para recolectar la miel y poder ofreceros el mejor producto.